"La textura es perfecta, el diseño aún mejor". Juve seguía trabajando en su proyecto. Llevaba días sin dormir y empezaba a sentirse cansado. Las pastillas que tomaba ya no servían de nada, tenía que descansar algo para poder continuar. "Dios... estoy destrozado... tengo que irme a dormir... acabaré los últimos polígonos del cargador y me iré a la cama, mañana tendré tiempo de acabarlo".
De repente alguien comenzó a llamar al timbre de la puerta de su casa con insistencia. Juve no esperaba a nadie y le sorprendía que llamaran a tan altas horas de la madrugada a su casa. No era la primera vez que ocurría, pero otras veces solían llamarle antes al móvil para concertar cita.
- Quién es?
- Abre. Soy yo. - Una voz seria y grave sonó del otro lado de la puerta.
- Quién es "yo"? - Juve seguía sin poder imaginarse de quién se trataba.
- Por Dios Juve, deja de jugar, tengo prisa. Abre la puerta, soy Alexej.
- Alexej! Haberlo dicho antes. - Con una sonrisa en la boca y frotándose los ojos Juve comenzó a abrir los cerrojos de la puerta blindada.
Al entrar Alexej miró a ambos lados con desconfianza.
- No está aquí, verdad?
- De qué me hablas? - Juve no entendía nada de lo que estaba pasando. Era la primera vez que Alexej pasaba por su casa ese año y ni siquiera se dignó a saludarle como habitualmente, con un abrazo entre verdaderos hermanos.
- El puto portugués. Pensé que le había matado, pero sigue vivo. Tú tienes relación con él.
- Simao? Por Dios, llevo sin verlo desde hace muchísimos meses... quizás incluso años.
- De acuerdo. Olvídalo. - Ahora Alexej abría los brazos en señal de querer darle un abrazo a Juve.
- Dios mío!, pero qué te ha ocurrido en la mano??!! Está asquerosa!
- Gracias... es una larga historia, pero en reaidad no lo noto ya. Ocurrió hace dos años, asíque se ha curado del todo. Lo único es que la cicatriz no se quita.
- Vaya...
- Sí. La verdad es que fue doloro...
- Qué te trae por la ciudad amigo? - Juve siempre se interesaba por las vidas de sus amigos. Era fiel como pocos, aunque siempre estaba muy ocupado con sus proyectos y las clases de yoga.
- Bueno... ya sabes... el trabajo y tal.
- No vas a contármelo, verdad?
- No.
- Bueno, no pasa nada. Me imagino de qué se trata.
- Y bien... qué tal con tus proyectos?
- Bien. Estoy trabajando en un arma. Te mostraré el diseño. Ya está casi terminada, pensaba acabarla mañana y presentársela a la empresa.
- Sigues en Beretta?
- Sí. Me han nombrado jefe del departamento de diseño, pero tengo mucha responsabilidad y quiero dedicarme plenamente a ello. No puedo dejar proyectos a medias, comprendes?
- Claro. Quieres que me vaya?
- No, no. Para nada. Lo que pasa es que me pillas en un mal momento, estoy muy cansado. Te importaría pasarte mañana?
- No sé si seguiré en la ciudad, pero si sigo me pasaré. - Alexej mostraba una leve sonrisa. Se alegraba de volver a ver a Juve. Habían pasado muchos años desde que trabajaron juntos en aquella misión. Juve era un gran compañero de equipo, aunque a veces no estuvieran del todo de acuerdo en cómo proceder en diversas situaciones. - Escucha... necesito que me consigas un par de rifles... tengo que encargarme de un problema estos días y me vendría bien un poco de ayuda.
- Eso está hecho. Tengo varios en el sótano, ya sabes... mala hierba nunca muere...
- Lo sé. Confiaba en que fuese así.
Juve sonrió.
- Me pasaré mañana. Si tienes tiempo podrías acompañarme en mi misión. No es oficial, es un simple tema personal.
- De acuerdo, me lo plantearé. Sólo te recuerdo que a mi profesor de yoga no le hace gracia que me salte sus clases. Es bastante estricto.
- Bueno... le podría hacer una visita amistosa... en cualquier caso tengo un par de amiguitos de la vieja madre que podrían encargarse del asunto.
- Mejor déjalo... ya se me ocurrirá algo
- Mmm... bueno... sí, claro...
- Alexej...
- Que sí, que sí... lo he captado.
- En serio, me cae bien. No quiero que le mates.
- Vale, vale. No te preocupes. No le mataré. "Personalmente"
- Bueno, lo siento Alexej, deberías irte... estoy muy cansado.
- Sí, sí... de acuerdo... mañana me pasaré por tu casa.
- Adiós.
Juve cerró la puerta y la bloqueó con los cerrojos. A paso lento, mientras pensaba en su proyecto, se dirigió hacia su cama.
"Quizás si el cargador lo amplío y le pongo una recámara de 35 el arma quedaría más profesional... tendré que echarle un vistazo mañana."
Tras tumbarse en su cama se quedó dormido en pocos minutos.
[] [] [] []
Alexej salió del portal y sacó su móvil del bolsillo. Marcando un número de su agenda telefónica miró el reloj. "Es algo tarde... las 4.32 AM... espero que siga despierto..."
Al otro lado de la línea alguien contestó a la llamada con voz de ultratumba:
- Sí?
- Aquí Stukov. Necesito que me hagas un favor. Reúne a tus hombres. Hasta dentro de 4 horas quiero que hayáis visitado la siguiente dirección y eliminado al sujeto que te voy a nombrar...
- Te escucho.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
¿Yoga? ¿Me has puesto haciendo Yoga? Anda que... Jejejeje...
Publicar un comentario